Una medalla con una efigie primitiva de Odín y otras joyas de unos 1.500 años de antigüedad han sido halladas en Dinamarca
Un bracteato de oro (una medalla que se colgaba del cuello con un cordón o una cadena) con la efigie de Odín, el dios supremo de la mitología nórdica, ha sido hallado por un aficionado a los detectores de metales que exploraba la isla de Loland, la cuarta más grande de Dinamarca, junto con sus dos hijos de 10 y 12 años de edad, según informa el Museo Lolland-Falster en un comunicado. El bracteato, de unos 1.500 años de antigüedad, data de la Edad del Hierro germánica y constituye una de las primeras representaciones de la antigua religión nórdica.
En el anverso de la medalla aparece un rostro de perfil sobre un caballo, como si estuviera flotando por encima del animal. Otros bracteatos similares han permitido identificar al sujeto como Odín, el dios de la sabiduría, de la guerra, de la muerte, de la magia y de la poesía. Asimismo, una inscripción rúnica se refiere a él como «el alto», uno de los muchos sobrenombres que los nórdicos le dieron a Odín. «Creemos que el rey de los dioses aparece aquí como un chamán«, destaca Marie Brinch, del Museo Lolland-Falster. Odín reinaba en el majestuoso salón del Valhala, adonde iban los héroes muertos en combate, pero los estudiosos consideran que también era un chamán, un intermediario entre los hombres y los dioses que poseía el don de la curación. La conclusión se basó en otros hallazgos de bracteates similares que incluyen la inscripción rúnica «El altísimo», uno de los apodos de Odin.
«Creemos que Odín aparece aquí como un chamán», destaca Marie Brinch
El bracteato de oro, probablemente utilizado como amuleto, muestra la imagen de un caballo, pues Odín podía adquirir la forma que deseara para desplazarse a cualquier lugar. Los motivos representados también podrían estar relacionados con las habilidades mágicas de Odín como sanador de caballos enfermos. «El caballo fue un medio de transporte muy valioso durante la Edad del Hierro en esta región, así que tiene sentido que buscaran la ayuda de los dioses para evitar que el animal sufriese daños. Esta pieza nos explica cómo se relacionaban los seres humanos con los dioses y cómo utilizaban la magia«, reflexiona Brinch. Los arqueólogos aficionados también han encontrado un anillo de oro, un pendiente de oro, piezas de oro de un probable collar y diferentes piezas de plata.
El periodo que siguió la caída del Imperio romano se conoce como Edad de Hierro germánica, y se divide en las edades de Hierro germánica temprana y tardía, que en Suecia se conoce como la era de Vendel, con ricos sitios funerarios en el cauce del lago Mälar. La temprana Edad de Hierro germánica es el periodo en el cual aparecen en la historia los danos, y según Jordanes, eran descendientes de los suecos (suehans, suetidi) que habían reemplazado a los hérulos.