El ministro de Justicia, Rafael Catalá, presentó este martes 6 de octubre la memoria anual de la Fundación Pluralismo y Convivencia, que en esta ocasión presentaba una memoria especial al cumplirse diez años de existencia de la fundación. Catalá ha destacado a España como ejemplo de convivencia, pluralismo y calidad democrática y ha afirmado que la Fundación da respuesta a las nuevas necesidades de una sociedad en la que el 7 % de la población profesa alguna religión minoritaria. En su intervención, Catalá ha defendido que España es “ejemplo de convivencia, pluralidad y calidad democrática” y da una señal de “optimismo, de respeto, integración y tolerancia”. Un trabajo que los profesionales de la Fundación han llevado a cabo pese a los recortes. “En época de austeridad es donde cobra mayor valor todavía la imaginación, la eficiencia, la corresponsabilidad y la priorización inteligente de los objetivos”, reconoció. La Fundación Pluralismo y Convivencia, según ha matizado, demuestra el compromiso asumido por los distintos gobiernos “con la diversidad y el derecho a la libertad religiosa” del 7% de la ciudadanía que, en España, profesa una religión diferente a la católica. Por su parte, el director de Cooperación Jurídica Internacional y Relaciones con las Confesiones, Javier Herrera García-Canturri, destacó en su intervención que Pluralismo y Convivencia ha logrado “transmitir a la sociedad española un mayor conocimiento sobre la pluralidad religiosa”. “Hace unos años, la sociedad era fundamentalmente monorreligiosa y se ha convertido en una sociedad plurirreligiosa, multicultural”, añadió.
Finalmente, el director de la Fundación Pluralismo y Convivencia, Fernando Arias, agradeció la colaboración que desde el primer momento les ofrecieron las distintas confesiones religiosas, de las administraciones públicas y especialmente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), de las universidades y expertos. Arias ha asegurado que el balance de estos 10 años es “muy positivo”, pero ha puntualizado que se presentan nuevos retos como mejorar el apoyo a los proyectos locales, dar un mayor asesoramiento a las administraciones públicas o el trabajo con la opinión pública, que considera aún “una asignatura pendiente”. En este sentido, apuesta por buscar nuevos escenarios y herramientas para ayudar a la sociedad a concebirse como “una sociedad plural desde el punto de vista religioso”.
AYUDAS DEL ESTADO A LAS MINORÍAS RELIGIOSAS
La financiación mediante ayudas a proyectos de las confesiones se desarrolla a través de dos líneas de convocatorias, una dirigida a las propias federaciones y organismos de coordinación -Línea 1- y otra a los proyectos finalistas de las comunidades locales -Línea 2-, entre los que destacan iniciativas educativas, culturales y de integración social. Así, de los 30 millones de euros asignados entre 2005 y 2014, 13,2 millones fueron destinados a los evangélicos -el 53% por la línea 2-, 12,2 millones fueron para los musulmanes -un 56% por la línea 2- y 4,5 millones para los judíos -un 64% por la línea 1-. Proyectos financiados por las ayudas de la Línea 2. / Memoria 2014 PyC En los últimos dos años, la congelación del presupuesto asignado a la entidad ha supuesto una sensible disminución en las cantidades para la línea 2, la del apoyo a proyectos de entidades y comunidades locales.
Atendiendo a los últimos datos, en el año 2014 concurrieron a la convocatoria de ayudas por la línea 1 la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE), la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) y la Comisión Islámica de España (CIE). El coste total de los proyectos que presentaron ascendía a 4,5 millones de euros, de los cuales solicitaron a la Fundación un total de 3,4 millones, concediéndose finalmente 733.768 euros.